Diasmina Ortiz, la eterna novia de Cumaná

Diasmina Ortiz de Amundaraín, conocida como “La novia de Cumaná” nació el 06 de abril de 1939. Ella cuenta el origen de esa denominación: “En la Galería de Arte quisieron nombrar una reina y todavía soy yo, vitalicia”. Cuando cumplió 72 años, en abril, la Universidad de Oriente y la Red de Arte del estado Sucre se unieron para homenajearla.

Diasmina, en cuyo armario colgaban más de 70 vestidos “sin contar los que estaban guardados”, contó su hija, tenía como misión adornar y embellecer su ciudad y aportar valores a la cultura de su estado.

Por su parte, la artista textil Milka Ugas, amiga cercana, expresó que la Eterna Novia realizó numerosos trabajos comunitarios con niños.

Reveló que este patrimonio popular de la ciudad comenzó desde muy joven a maquillarse, principalmente los ojos.

“Todas nosotras éramos altas y esbeltas, de cabello largo, y ella era bajita, no fea; pero decía ‘yo tengo que buscar la manera de llamar más la atención que ellas’, y así fue como nació el personaje que hoy conocemos”, narró entre sonrisas.

La eterna novia de Cumaná murió a los 76 años a causa de una indigestión, fue hospitalizada el jueves 9 de julio, y luego de una subida de azúcar, sufrió un paro respiratorio e inmediatamente un infarto que le ocasionaría la muerte aproximadamente a las 10:00 am. “Le descubrieron una bronquitis asintomática”, acotó su hija Carmen Amundaraín.

En el medio de comunicación “El tiempo” en el año 2011 le hicieron una entrevista, y a continuación compartimos con ustedes la información que obtuvo la entrevistadora Yamilet Herrera:

“Habla sin parar y es muy expresiva. Nombra a personajes históricos, fechas, terrenos recuperados, obras edificadas y entregadas. Cuenta que siempre ha sido invitada por las instituciones y los gobernantes de turno para que esté presente en actos oficiales”

-¿Qué estudió?

-Cuando me gradué de bachiller no había universidad aquí. Tenía que irme a Caracas y mi mamá decía que las muchachas que se iban de su casa no eran buenas.

-¿Tiene algún vínculo con el arte?

-Hice una escultura, con restos de lápices labiales y maquillaje. La tengo en mi casa.

-¿Su atuendo tiene un significado especial?

-Todo el tiempo me visto así, al estilo romántico, para pasear por mi ciudad, para adornarla.

-¿Quién le hace su ropa?

-Toda la vida he tenido una costurera que la confecciona. El maquillaje sí me lo hago yo. Hace poco hicieron un desfile de modas al estilo Diasmina, para jóvenes, todas vestidas y pintadas como yo.

-Cuando va a la playa, ¿qué tipo de prendas escoge?

-Me encanta vestirme para esos momentos. La playa es linda, pero yo, mi sombrero, mi traje de baño, mi paño, todo tiene que ser lindísimo. Es que a mí me gusta que hasta la mesa esté bien bonita. En el pueblo donde tengo mi casa de playa, Tocuyare, toditos vienen a verme, entonces tú los ves con las cámaras, tomándome fotos.

Cinco bodas, un amor

Diasmina se ha casado cinco veces con el mismo marido: Julio Agustín Amundaraín, contador, quien trabajó en la Tesorería del Gobierno desde el mandato de Marcos Pérez Jiménez y ahora está jubilado.

-¿Por qué se ha casado cinco veces?

-Eso se llama renovación de votos. Cada vez que cumplimos 10 años juntos nos volvemos a casar. Siempre ha sido en una isla: primero en Margarita; después en Galápagos (Ecuador), cuando allí no había nada, todo era salvaje: La siguiente fue en “la del encanto” (Puerto Rico), otra vez en Margarita y la más reciente, en Coche. Y no me casa cura sino obispo o arzobispo.  También cambiamos de casa, después de cada matrimonio ya tenemos todo preparado para mudarnos.

-¿Se viste de blanco para las ceremonias?

-La primera vez sí, pero depende, cuando fueron de rubí el traje era como vinotinto, esta vez fue dorado, porque eran 50 años, y así.

-¿Cuál es el secreto para mantenerse enamorada?

-Él me ha cuidado como si yo fuera su hija, ¿qué te parece? Aprender a vivir y a quererse es algo precioso. Él es una persona muy callada. Le digo: ¡Ay amor, me tienes atormentada!, porque no dice nada.

-¿No es celoso?

-Sabe lo que tiene. Yo no bebo, imagíname así pintada de colores y tomando, van a decir: ¡Esa tiene una nota! Esa pauta la doy yo. Una vez llegué desnuda y tapada con un chal de rosas para la inauguración de una obra (risas).

-¿Tienen hijos?

-Nuestros hijos se llaman Julio Agustín Segundo, María Lina Primera del Valle y Carmen Julia Tercera. Los nietos siguen esa línea.

-¿Cree que en una vida pasada fue monarca?

-No, quise ponerles esos nombres para darle fuerza a la palabra.

-¿Qué piensa que haya sido usted en una vida anterior, si la hubiera?

-Siempre he dicho que era yo y más nadie. Cuando voy a una fiesta, toda la vida lo mío ha sido llegar de última para vestirme como me da la gana, que yo sea la persona que da el toque perfecto (risas). Siempre dicen: hay que esperar a que llegue esa mujer a ver cómo viene.

-Y cuando llega, ¿qué siente?

-Emoción, porque uno ve el aplauso, siente el murmullo. Eso ha sido desde joven. Recuerdo entonces ¡cómo llamaba la atención cuando nadaba para ir a agarrar las guamas!

-¿Qué palabra la define?

-Alegría.

-¿Su secreto para estar siempre alegre y radiante?

-Cantar, bordar, estar en la calle, con el público, con mis amigas.

Bibliografía:

Artículo publicado por Yamilet Herrera para el portal Web del Tiempo en el año 2011. Fuente: http://eltiempo.com.ve/tiempo-libre/cultura/diasmina-es-novia-de-cumana/29899

Artículo publicado por Leonardo Bruzual Vasquez para el portal Web de “El Correo del Orinoco” en el año 2015. Fuente: http://www.correodelorinoco.gob.ve/regiones/fallecio-a-76-anos-%E2%80%9Cla-novia-cumana%E2%80%9D/

Artículo publicado en el portal Web de Cayaurima. Fuente: http://radiocayaurima.org.ve/?p=6837